Uno de los jóvenes protagonistas de la serie Glee hizo una confesión que sorprendió. Se trata de Cory Monteith, quien interpreta a Finn Hudson en la serie de FOX que se confeso con la revista “Parade”.

El actor revelo que cuando era adolescente era adicto a las drogas. El actor de 29 años se crió en un hogar sin padre, ya que fue abandonado cuando tenía sólo siete años y con el tiempo, Cory comenzó a beber y fumar marihuana, dejando de ir al colegio para consumir junto a un grupo de amigos. Asistió a 12 diferentes colegios, hasta que cumplió los 16 años y fue a rehabilitación. “Mi personaje en Glee, está muy lejos de parecerse al adolescente que fui yo”. Además confeso que le robaba a sus parientes.

Cory contó que tiene suerte de seguir con vida porque las drogas comenzaron a manejarle la vida en especial su cabeza. Con la ayuda de sus seres queridos quienes lo amenazaron con denunciarlo a la policía si no dejaba sus adicciones el actor se recupero eligiendo el mejor camino: yendo a un lugar para rehabilitarse.

“Caí en cuenta y finalmente me dije que le daría sentido a mi vida y descubriría la verdadera razón por la que lo hice”, “No quiero que los chicos piensen que está bien consumir drogas y que con eso se volverán famosos. A aquellas personas que podrían rendirse les digo que se sinceren con lo que realmente quieren y lo persigan. Si yo pude cualquiera puede”, finalizó el actor.