La actriz se sentó a dialogar con Mario Pergolini en su programa “Otro día perdido” por la pantalla de El Trece, y no dejó tema sin tocar: desde su relación con el futbolista del Galatasaray y la convivencia en Estambul, hasta sus impulsos y los escándalos mediáticos que la tuvieron en el ojo de la tormenta.

El encuentro, que contó con el humor ácido de los panelistas Laila Roth y Agustín “Rada” Aristarán —quienes bromearon sobre las condiciones para la nota y la polémica de Luzu TV—, sirvió como plataforma para que la China hablara de su costado más íntimo y polémico.

💥 Impulsiva y con "ganas de venganza"

Uno de los momentos más picantes de la entrevista llegó cuando la actriz se refirió a su carácter y a su pasado reciente, desmintiendo de paso una versión mediática que circuló tras su ruptura con Rusherking.

"Debería empezar a vengarme más. Tengo ganas. En la vida real soy bastante vengativa, pero no de ir a rayarte un auto”, comenzó diciendo, echando por tierra el rumor sobre el vehículo de su ex.

Sin embargo, reconoció su punto débil: la impulsividad. “Soy muy hiriente con las palabras. Digo cosas de las que después me arrepiento", explicó. Y agregó con picardía: “Pasa que soy muy impulsiva. Mauro sabe que me tiene que sacar el teléfono de las manos”.

💍 Icardi, convivencia y la boda pendiente

La relación con Mauro Icardi fue un tema central. Suárez precisó que se conocen desde hace tres años y medio, y que el 29 de noviembre celebrarán su primer aniversario de novios.

Consultada sobre el matrimonio, la China fue directa, revelando una situación pendiente con el delantero:

“Yo no me casé, estuve a punto. Me ofrecieron matrimonio, pero se tiene que divorciar primero”, confesó en clara referencia a Icardi, quien aún está legalmente casado con Wanda Nara.

La actriz analizó la dinámica de su actual relación, reconociendo que su personalidad independiente chocaba con la estructura de Icardi. "Siempre fui muy independiente y un poco egoísta, quizás por eso no me funcionaron las relaciones. Mauro es muy estructurado”, señaló.

Respecto a su mudanza a Estambul, reconoció: “Fue demasiado rápido lo de Turquía”. No obstante, destacó que habló con Nico Cabré y Benjamín Vicuña y que la experiencia es enriquecedora para sus hijos: “Vamos, venimos, para ellos está bueno porque aprenden de otra cultura y otro idioma”.

👧 La crianza y los escándalos

La exposición mediática y cómo afecta a sus hijos (Rufina, Magnolia y Amancio) también fue un punto de diálogo. La China Suárez contó que con Rufina (fruto de su relación con Vicuña) debe abordar con más detalle los comentarios negativos que circulan en los medios y las redes sociales.

Finalmente, la actriz se definió a sí misma, enviando un mensaje claro sobre sus posturas personales: “Nunca fui tibia ni seré, no me gustan los tibios. Sé lo que soy cómo persona y espero que se valore”.

Este lunes se podrá ver la entrevista de Moria Casan y la China Suárez que se grabó el viernes en el programa de la diva.